Lista de verificación prefloración para plantas de cannabis de exterior

El cultivador profesional de cannabis en exterior suele revisar una lista de verificación antes de que su cultivo comience a florecer. Algunas de estas comprobaciones y procedimientos son de sentido común, pero otras son útiles para todo tipo de cultivadores, incluidos los cultivadores caseros de pequeña escala.

Qué deben tener en cuenta los cultivadores de cannabis al aire libre a finales de la primavera

A finales de primavera / principios de verano, la mayoría de los cultivadores de exterior han superado la delicada fase de plántula. Las plantas suelen estar bien establecidas, aunque no necesariamente aún en floración.

Si cultivas semillas feminizadas, suelen empezar a florecer cuando la luz del sol cae por debajo de las 14 - 14,5 horas diarias. Si cultivas semillas autoflorecientes, empiezan a florecer alrededor de un mes después de la germinación – independientemente del ciclo de luz. En esta época es recomendable revisar las plantas y evaluarlas antes de que empiecen a florecer.

1. Verifica el sexo de tu planta

A menos que intentes producir tus propias semillas de marihuana deliberadamente, este es un buen momento para revisar las plantas a medida que muestran su sexo. Los machos se pueden destruir. El espacio que dejan será un espacio extra muy bienvenido para las plantas restantes. Aunque algunos cultivadores de exterior usan semillas regulares, la mayoría cultiva a partir de semillas feminizadas fotoperiódicas o semillas autoflorecientes.

Consejo profesional: Aunque es poco frecuente para los cultivadores de exterior, también se deben buscar las plantas hermafroditas y eliminarlas si se encuentran.

2. Inspecciona para detectar plagas, enfermedades y moho.

El moho rara vez es un problema para las plantas que están a punto de florecer. Sin embargo, las plagas y enfermedades pueden ser un verdadero dolor de cabeza para algunas. Al cultivar al aire libre, las plagas pueden establecerse y requerir atención inmediata. Muchos cultivadores de exterior compran y liberan regularmente insectos beneficiosos de diversos tipos para el jardín. Las mariquitas son excelentes para combatir las infestaciones de pulgones / áfidos. Hay muchos otros insectos depredadores beneficiosos disponibles según las necesidades de tu país o latitud. Se pueden comprar fácilmente por internet o, cada vez más, en muchos centros de jardinería.

Consejo profesional: Quienes cultivan en invernadero o túnel de polietileno (sin depredadores naturales) pueden experimentar una rápida proliferación de plagas. Introducir insectos depredadores beneficiosos lo antes posible es una excelente estrategia.

3. Evaluar la ingesta y las necesidades de nutrientes

Esperamos que tus plantas de marihuana de exterior hayan crecido bien durante las primeras semanas / meses de crecimiento vegetativo. A medida que siguen creciendo, su masa radicular crecerá y absorberá más agua, nutrientes y minerales. Puedes aplicar un abono de cobertura de uso general para la floración. Puedes usar una regadera si usas nutrientes líquidos. También puedes esparcir nutrientes granulados sobre la capa superficial del suelo. Estos se descompondrán lentamente, liberando nutrientes valiosos al suelo. Hay varias opciones disponibles – harina de sangre/pescado/hueso, pellets de excremento de gallina, guano de murciélago, algas marinas, etc.

Consejos profesionales: 

• Nutrientes orgánicos de liberación lenta enterrados en el suelo antes de que comience el cultivo (los BioTabs están completamente probados y recomendados) garantizan una gran cantidad de minerales/nutrientes a medida que las plantas crecen.
  
  
• Cambia de nutrientes vegetales ricos en nitrógeno a nutrientes de floración (más ricos en fósforo y potasio con relativamente menos nitrógeno) a medida que se acerca la floración.
  
  
• Quienes cultivan en condiciones muy secas o desérticas pueden agregar al suelo abundantes cristales absorbentes de agua (similares al material absorbente de los pañales para bebés). Estos pueden absorber cantidades significativas de agua a nivel de la raíz.
  
  
• La buena salud de las plantas es a menudo el resultado de los esfuerzos realizados la temporada anterior, incorporando abundante estiércol bien descompuesto, fertilizantes, algas, mejoradores del suelo, etc. ¡La salud del suelo es vital, cuida tus lugares de cultivo y te servirán durante muchos años!

4. Considera realizar ajustes en el entrenamiento

Si te preocupa que tu planta pueda estar creciendo demasiado, ahora es el momento de considerar tus opciones. 

• Algunos utilizan una pantalla para SCROG de exterior
• Podrías considerar la técnica de la poda apical del cannabis
• Algunos cultivadores utilizan el entrenamiento de bajo estrés del cannabis (LST – del inglés. “low stress training”) para ayudar a controlar las plantas que están saliendo de control. El cultivador ata las ramas con cuerda de jardinería. A veces, esto se facilita si el tallo/rama se debilita aplastándolo entre el pulgar y el índice. Este proceso se conoce como supercropping.

Consejo profesional: Los cultivadores de exterior deben ser muy cuidadosos al seleccionar sus cepas. Consulta la selección de semillas de cannabis de exterior de tu banco de semillas preferido. Y, si es necesario, consulta su sitio web / servicio de asistencia para obtener consejos específicos sobre las mejores variedades para tu latitud / ubicación. 

5. Limpia el dosel inferior

Muchos cultivadores eliminan las ramas y hojas inferiores, ya que consideran que esto permite que la planta concentre su crecimiento en los principales puntos de floración superiores. Eliminar el follaje inferior suele mejorar la ventilación, lo que a su vez puede ayudar a reducir la probabilidad de moho en la floración posterior.

Consejo profesional: Mantén limpia la superficie del suelo. Ten en cuenta que algunos utilizan cultivos de cobertura o cultivos asociados para evitar que el suelo se seque. Las leguminosas (que transforman el nitrógeno atmosférico en fertilizantes útiles para el suelo), como el trébol y la alfalfa, son útiles. También lo son el caupí, la arveja, la albahaca y muchas otras.

6. Asegura tus plantas

Puede que tus plantas ya hayan superado el primer o segundo mes de crecimiento vegetativo. Pronto llegará la floración, y con ella, ramas pesadas, la amenaza de plagas y la posibilidad de condiciones climáticas extremas. Algunos cultivadores de exterior utilizan mallas tipo SCROG para sujetar las ramas que con el tiempo podrían volverse demasiado pesadas. Los cultivadores de guerrilla pueden reforzar un perímetro protector externo con espinas/zarzas para prevenir que ciervos, paseadores de perros, etc., descubran su parcela.

Quienes prevean un posible mal tiempo pueden contar con equipo, p. ej. lonas y estacas / tutores de madera, en caso de lluvias intensas u olas de calor.

Consejo profesional: Un cultivo al aire libre bien planificado y preparado se mantendrá productivo durante muchos años. ¡Esfuérzate por mejorar la calidad del suelo / del terreno y verás cómo tus cosechas mejoran constantemente!

7. Monitoriza los ciclos de luz (para fotoperiodos)

Si cultivas la misma cepa durante un par de temporadas, tendrás una idea de cuándo empezará a florecer. El servicio de atención al cliente de tu banco de semillas también podrá recomendarte qué variedades se adaptan mejor a tu ubicación, latitud, altitud, etc.

En el hemisferio norte, las variedades de semillas feminizadas suelen empezar a florecer cuando los días se acortan en verano llegando a alrededor de unas 14 - 14,5 horas de luz diaria (o menos). Suelen estar listas para cosechar entre alrededor de 2 y 2,5 meses después.

Consejo profesional: El uso de semillas autoflorecientes o semillas “feminizadas rápidas” (como Think Fast) es altamente recomendado para los cultivadores que se ponen nerviosos con el clima de principios / finales de temporada.

8. Corta cualquier vegetación o ramas colgantes cercanas

Especialmente si las ramas de árboles, arbustos, etc., están bloqueando la luz solar para tus plantas. No tengas piedad: tu objetivo es maximizar la luz solar para tus plantas de cannabis. Prioriza los lugares de cultivo que ofrecen la mayor cantidad de luz directa para tus plantas. Trabaja con esmero en estos valiosos lugares para maximizar la salud del suelo, permitiendo que el lugar de cultivo brinde muchos años de uso valioso.

9. Ten un plan de respaldo en caso de calor extremo, tormentas, sequía, etc.

Ahora es el momento de considerar tus opciones (y prepararse) si te ves afectado por problemas climáticos más adelante en la floración.
Si estás cultivando en tu propio terreno, puede que consigas llevar las plantas cultivadas en macetas a un garaje o bajo techo para protegerlas de condiciones opresivas (calor, frío, viento o lluvia). Si cultivas directamente en el suelo, puedes proteger tus plantas del calor extremo con una malla de sombreo de nailon. Estas están disponibles en diferentes niveles de sombra. Es mejor invertir en mallas de sombreo y estacas de soporte ahora, en lugar de esperar a que llegue la crisis. Asimismo, las lonas son una excelente inversión inicial, ya que pueden usarse como cubierta protectora en caso de tormentas o lluvias extremas.

10. Gestión del agua

Los cultivadores de exterior son cada vez más conscientes de garantizar las necesidades hídricas, a veces exigentes, de sus plantas. ¡Sobre todo si están cultivando un monstruo de 4 m / 13 pies de altura! Es recomendable pensar con antelación en tus planes de gestión del agua antes de que el sol del verano marchite tus plantas estrella.

Si cultivas en tu propio terreno, puede ser fácil conectar una manguera a las plantas. Si cultivas al aire libre, prioriza los lugares de cultivo cercanos a una fuente de agua exterior, como un pequeño arroyo, un lago, etc..

11. Documenta tu cultivo

Algunos de tus aprendizajes más importantes permanecerán en tu memoria si los anotas por escrito. Esto podría estar relacionado, por ejemplo, con las fechas de la última helada de primavera y la fecha en que el clima otoñal se volvió simplemente insostenible para el cultivo.

También podrías registrar los momentos en que tus intervenciones (por ejemplo, alimentación, mantenimiento, etc.) fueron más útiles. Muchos de los mejores cultivadores tienen hábitos obsesivos que resultan útiles cuando se trata de revisar una y otra vez sus planes y preparativos.

Reflexiones finales y conclusiones clave

Cultivar marihuana al aire libre es facilísimo y económico. No necesitas invertir en un cuarto de cultivo interior de alta tecnología ni gastar dinero en electricidad para luces, calefacción y aire acondicionado. Cultivar al aire libre es la forma más económica de cultivar tu propio cannabis. Tus únicos gastos reales son las semillas de cannabis y algunos nutrientes. 

Si cultivas semillas autoflorecientes, podrías obtener 2 o incluso 3 cosechas consecutivas de exterior cada temporada. Si cultivas semillas feminizadas fotoperiódicas, solo obtendrás una cosecha de cannabis de exterior, pero podría ser de varios centos de gramos (docenas de onzas). Recuerda, si cultivas las mejores semillas de cannabis de exterior, la calidad de tu cosecha puede estar a la par de la calidad de interior.

Tus principales retos son comprar las semillas de exterior adecuadas para tu ubicación y planificar / prepararte bien. ¡Disfruta del cultivo al aire libre!